Ref. 104478
Location: R.1645
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Keywords:
Coste, Financiación, Política sanitaria, Servicios de salud
Abstract:
Este artículo constituye una revisión de las aportaciones de la economía de la salud desde una perspectiva crítica, y tiene como objetivo reflexionar sobre las nuevas reorientaciones de la gestión de servicios sanitarios, a partir de la definición de conceptos como eficiencia, coste-efectividad y calidad (objetivos motores de las actuales reformas planteadas en la sanidad). Los principales tópicos abordados fueron las características y retos de los sistemas sanitarios en Europa, las constantes transformaciones en la relación entre economía y gestión sanitaria, las relaciones existentes entre sistemas sanitarios, el reto de la eficiencia en sistemas e instituciones sanitarias, y las innovaciones en las formas gestión sanitaria. Los principales hallazgos y conclusiones revelan que la economía y la gestión de la salud ha tenido un desarollo extraordinario en las últimas décadas y el papel que ejerce en la configuración de las políticas sanitaria es creciente. Existe una relación entre sistema socio-económico y la organización del sistema sanitario, y entre ésta y la eficiencia en el logro de los objetivos puntuales de mejorar la salud, equidad y satisfacción. A pesar de que haya acuerdo de que sea preciso mejorar la eficiencia del sistema para hacer que los servicios sanitarios sean más sensibles a las demandas de los usuarios y profesionales (además de mejorar en calidad controlando el crecimiento del gasto), no son tan evidentes los efectos que pueden tener las medidas de aumento de la eficiencia de los sistemas en relación con la equidad. No se puede olvidar, que la eficiencia económica no garantiza la equidad en el acceso a los servicios sanitarios, ni tampoco asegura la calidad de los mismos. Es verdad que la eficiencia técnica del trabajo del profesional de salud puede condicionar la eficiencia económica del sistema sanitario, pero también ocurre que la sanidad, su organización y gestión, no solamente condicionan la eficiencia técnica de la salud sino también su efectividad e incluso su eficacia. Para hablar de eficiencia, es necesario establecer de antemano qué objetivos son los que se pretende alcanzar. Entre ellos, para sistemas universales de salud (como es el caso de España), la calidad de los servicios y la equidad en el acceso a los mismos deben ser prioritarios. Por lo tanto, el mayor desafío que se plantea hoy (en una época en la que a todos los niveles se habla en reducción del consumo, del coste-efectividad, de la eficiencia de los servicios y también del aumento de la compatitividad), es formular el objetivo de las reformas como el reto de mantener los valores políticos de equidad, universalidad y calidad, es decir, escoger entre las alternativas posibles aquellas más efectivas y menos costosas.